Street Art y un tal Banksy // mar 15, 2016
Nos gusta clasificar, dar a las cosas su lugar correspondiente. Los colores, los seres vivos, las comidas, el tiempo… todo tiene su categoría, su medida, su etiqueta, incluido el arte.
Una obra, pertenece a un estilo, un movimiento artístico, una época pero… a veces las clasificaciones existentes no cubren las necesidades que van surgiendo y necesitamos actualizarlas.
En el siglo XIX, por ejemplo, se consideraban únicamente 5 tipos de arte (arquitectura, escultura, música, literatura y pintura). En el XX sin embargo, se hablaba de 9 artes, entre los que se incluyeron las artes escénicas, el cine, la fotografía y la historieta. Pero… ¿qué hay de la moda? o de la gastronomía, el interiorismo o, incluso, la modalidad que parece haber cobrado más popularidad en los últimos años: el Street Art, o arte callejero.
Street Art, por muy novedoso que suene el término, no es un fenómeno que haya surgido recientemente, pues ni siquiera podemos estar seguros de cuál sería su lugar y época originaria. Los romanos, a menudo escribían y pintaban sobre muros y fachadas; pero lo mismo sucedía con otras culturas mucho anteriores, así que no podemos hablar de un inicio concreto.
Sin embargo, es en la década de los 60, y especialmente de los 70, cuando surge un boom artístico en las calles de los Estados Unidos que sí podría considerarse como el comienzo del Street Art en su versión contemporánea.
Es durante esa época cuando se produce toda una revolución en torno al arte del graffiti en todas sus versiones (tagging, throw-up, latrinalia…), que se apodera de calles, puentes y vagones de metro de las grandes ciudades, especialmente de su epicentro, la ciudad de Nueva York. Esta moda en los 80 y 90 también se extenderá por todo el hemisferio norte, incluido nuestro país.
Pero, aunque algunos segmentos de la población empezaban a considerar el hecho de pintar sobre muros y mobiliario urbano como una manifestación artística, lo único cierto es que la mayor parte de la sociedad sólo lo consideraba un acto vandálico. Incluso una plaga; una forma de destruir más que de embellecer o de lanzar un mensaje al mundo.
Ha sido en la última década cuando se ha producido un cambio realmente significativo en la percepción de esta forma de arte. Surgen personajes como Julien Malland, Shepard Fairey, Dave Kinsey o Banksy que, dejan atrás el cliché del vándalo, para viajar por las grandes metrópolis del planeta, dejando su huella a través de representaciones de estilo propio y marcado carácter político y social.
Los frecuentemente nada ortodoxos autores de este tipo de arte, muchas veces arriesgan el tipo para plasmar sus obras en los lugares más inaccesibles e inesperados. Utilizan técnicas que van desde el uso de plantillas, pegatinas y pósters; hasta elementos como farolas, cables, cabinas… que integran en sus diseños, haciéndolos parte de una obra única y efímera.
Museos de todo el mundo, ya incluyen en su programación, aunque todavía de un modo muy esporádico, exhibiciones temporales relacionadas con el Street Art. El Amsterdam Museum, por ejemplo, acogió desde septiembre hasta este pasado mes de enero, la muestra “NEW YORK MEETS THE DAM“, centrada en exclusiva en la historia del graffiti.
En Houston, por otro lado, se ha inaugurado a comienzos de este año el GASAM Texas (The Graffiti and Street Art Museum of Texas), el primer museo dedicado en exclusiva a la exploración de la técnica del graffiti y el Street Art.
La pasada semana, medios de todo el mundo publicaron la noticia de que podría haberse desvelado la identidad del mencionado Banksy, el más representativo y popular de estos artistas callejeros. Pero, al mismo tiempo, el más misterioso, ya que, su identidad permanecía hasta el momento en el anonimato. Se conoce que es originario de Bristol y reside en Nueva York y, según la mencionada noticia, su verdadero nombre podría ser Robin Gunningham.
Tanto si el resultado de la investigación resulta verdadero o no, lo que sí es cierto es que las obras del polémico artista se subastan por cientos de miles de dólares y que, coleccionistas de todo el mundo están dispuestos a pagar pequeñas y no tan pequeñas fortunas por contar con un Banksy original en su repertorio.
Para los que no tenemos ese privilegio, contamos con la ventaja de vivir en una era en la que, lo que antes sólo podían ver unos pocos al pasar por la calle, ahora podemos admirarlo desde cualquier parte del mundo y no sólo como un recuerdo fugaz, sino como un símbolo perdurable que poder contemplar a placer.
¿Y tú? ¿Cuánto pagarías por un Banksy?
Si juntamos arte y cine sale… ¿la historia de un loco pelirrojo? // mar 08, 2016
La semana pasada se celebró la 88ª edición de los premios Oscar. Durante días, todo el mundo hacía balance de la espectacular gala, el glamour, Leonardo DiCaprio, los elegantes vestidos que lucieron las estrellas, los discursos y agradecimientos, la polémica racial, etc. Pero a veces parece que olvidamos hablar de lo más importante del gran evento cinematográfico del año: las películas.
Con mayor o menor éxito, muchos han sido los artistas y obras de arte cuyas historias se han llevado a la gran pantalla. Autores como Monet, Caravaggio, Basquiat, Rembrandt, Munch, Renoir, Klimt, Pollock, Lautrec, El Greco y un sinfín de grandes artistas cuentan con películas de nombre homónimo. Algunas más logradas que otras, eso sí. Y aunque eso lo dejamos a vuestro juicio, sí que nos atrevemos a mencionar el destacado papel de Frida Kahlo que interpretó la también mexicana Salma Hayek en 2002; y por cuyo papel fue nominada al Oscar a la mejor actriz protagonista.
No son pocas las películas que nos acercan al mundo del arte, algunas lo hacen desde una perspectiva más humorística y ficticia y otras desde un lado más realista o dramático. Podemos escoger entre cientos de opciones; desde pequeñas películas independientes, hasta títulos de grandes estrenos cinematográficos donde se mezclan hechos históricos con ficción. Un ejemplo de estas últimas lo pudimos ver recientemente en “La dama de Oro“ (2015), o en la algo floja “Monuments men“ (2014), en la que actuaban de nuevo reunidos Matt Damon y George Clooney. Esta vez no para robar obras como hicieron en “Ocean’s Twelve“ (2004), sino todo lo contrario, para salvaguardar el patrimonio artístico de los saqueadores nazis.
La última de las películas que encontramos en la cartelera de los cines es “La chica Danesa“ (2015), que ha contado con nada menos que con cuatro nominaciones en estos últimos Oscar. Su coprotagonista, Alicia Vikander, se hizo esta semana con la preciada estatuilla, aunque no sin cierta polémica de por medio.
El español Pablo Picasso ha sido llevado a la gran pantalla nada menos que en 10 ocasiones. La última de ellas representado por el célebre Anthony Hopkins, en 1996. Van Gogh cuenta con el mismo número de títulos, entre películas y cortometrajes, eso sin mencionar los documentales que analizan ya sea su vida, su estilo artístico o su legado.
En Fondo Arte-AS, nos ha llamado mucho la atención una película que se estrenará este año y trata sobre… ¿adivináis quién? Vincent Van Gogh, no podía ser otro. Pero en este caso hablamos de algo realmente insólito, ya que se trata de la primera película de animación realizada exclusivamente al óleo. Más de 100 artistas han imitado el estilo artístico de Van Gogh realizando a mano 56,800 pinturas que, uniéndose entre sí, forman los planos y escenas de este insólito largometraje. Aún no sabemos la fecha concreta en que “Loving Vincent“, que es como se titula la película, podrá verse en los cines, pero lo que sí podemos hacer es mostraros el trailer para que vosotros mismos decidáis si será algo que merezca la pena ver. ¡Ya nos contaréis qué os ha parecido!
Pintura, diseño, encuentros y viajes a Cuba // feb 26, 2016
¿Aún no has venido a Fondo Arte-AS a ver “Viaje a La Habana“, de Carmen Jabaloyes?
La colorida muestra que desde hace unas semanas se expone en nuestro espacio está inspirada en la capital cubana, sus paisajes, su gente y su cultura. Y es que ¿sabías que es precisamente en La Habana donde se encuentra unos de los patrimonios artísticos más importantes del continente americano? Su Museo Nacional de Bellas Artes alberga más de 45.000 piezas, algunas de las cuales pertenecen a las más importantes escuelas europeas.
La ciudad caribeña es cuna de grandes artistas contemporáneos como Elizabet Cerviño, Felipe Dulzaides, Fidel García, Levi Orta, Glenda León, Rodolfo Peraza o Humberto Díaz, entre otros.
Cada dos años La Habana se convierte en punto de encuentro del arte mundial, reuniendo artistas de 4 continentes que utilizan cada rincón de la ciudad como lienzo para exhibir sus creaciones artísticas. Este evento internacional único se conoce como la Bienal de La Habana y se celebra entre los meses de mayo y junio.
El último de estos encuentros, tuvo lugar en la primavera de 2015 y se lleva celebrando desde 1984, ¡nada menos que 32 años! En esta pasada edición participaron más de 100 autores contemporáneos originarios de países como Afganistán, Sudáfrica, Senegal, Noruega, India, España, Corea, Austria y un larguísimo etcétera; con una destacable presencia, por supuesto, de artistas cubanos.
Aún faltan 15 meses para que se celebre la decimotercera Bienal de La Habana, sin embargo, no tendremos que esperar tanto para que la capital cubana vuelva a convertirse en centro neurálgico del arte, ya que este próximo mes de mayo se celebrará en la ciudad la primera Bienal de Diseño de la Habana.
El evento se desarrollará del 14 al 20 de mayo y abarcará variadas manifestaciones, desde exposiciones y premios, hasta talleres que invadirán, no sólo la ciudad, sino diversas regiones del país.
Las convocatorias para los artistas ya están abiertas y en Fondo Arte-AS no podemos esperar para ver qué nos traerá esta gran feria del diseño. Mientras vamos preparando la maleta, os proponemos disfrutar del alternativo “Viaje a la Habana“ con el que Carmen Jabaloyes nos deleitará hasta el 1 de abril.
¡Te esperamos en Fondo Arte-AS!